-- A menos de un segundo se situó el grancanario Modesto Martín, con su Porsche 911 GT3.
-- Más de 8.000 aficionados se situaron a lo largo del tramo, sobre todo en las curvas de La Josefa, Las Raíces o en el giro final de meta, en El Corvo.
El tinerfeño Enrique Cruz (Porsche 911 GT3) se impuso hoy en la VIII edición de la Subida a Moya, prueba valedera para el circuito regional de montaña. Con esta victoria, gracias a un tiempo récord de 3.48.508, el piloto deja prácticamente sentenciado el campeonato en detrimento del segundo clasificado y máximo rival, el grancanario Modesto Martín (Porsche 911 GT3).
La competición arrancó pasadas las 10:00 horas con la manga de entrenamientos, que estuvo marcada por la presencia de zonas de asfalto aún húmedas como consecuencia de la lluvia que descargó las noche anterior en los 6,45 kilómetros del tramo.
Este motivo permitió que el Mitsubishi Lancer EVO VI de Migue Cabral marcara en la primera manga el mejor tiempo (4.05.915), favorecido por la tracción integral de su montura. Este escenario no benefició a los dos Porsche, de propulsión trasera, con unos tiempos –Martín (4.08.836) y Cruz (4.10.077)- sensiblemente superiores.
Sin embargo, conforme avanzó la jornada y el firme ganó en adherencia, los Porsche volvieron a marcar el ritmo más fuerte entre los vehículos carrozados, quedando claro que la batalla final iba a estar entre los dos pilotos que se disputaban el campeonato regional de la modalidad.
Enrique Cruz reconoció, tras recoger el trofeo de vencedor de esta VIII Subida a Moya, que en la tanda de entrenamientos fue “muy complicado” conducir su vehículo. “Sabíamos que en la última manga íbamos a tener una oportunidad, así que en los dos primeras nos lo hemos tomado con calma”, aseguró el joven piloto tinerfeño. “En la última lo hemos puesto todo y el coche ha ido perfecto”, indicó.
En la categoría de barquetas el mejor tiempo lo marcó el piloto gomero José Manuel González (3.41.837), con su BRC 05, mientras que el segundo clasificado fue Julián Falcón (3.43.200) y su Silver Cars S2.
Más de 8.000 personas se apostaron a lo largo del tramo, cuyo punto de salida se encontraba a unos 300 metros del comienzo de la GC-75 (Moya-Fontanales). Como es costumbre, las zonas de mayor afluencia de público se situaron en La Josefa, Las Raíces, y en la curva de meta, en El Corvo.
ACTIVIDAD ECONÓMICA
La VIII Subida a Moya no solo es una prueba de referencia dentro del Campeonato Regional de Montaña, sino un evento largamente esperado cada año por los numerosos aficionados al motor de Moya. No obstante, la escudería Azuatil, organizadora del evento, es originaria de la Villa Verde.
El alcalde norteño, Poli Suárez, destacó la “importe labor dinamizadora” de esta cita en la actividad económica del municipio, con 8.000 personas que a lo largo de dos días -19 y 20 de octubre- han realizado un gasto importante en los bares, cafeterías, restaurantes y comercios. A ello hay que sumar, recordó, la promoción alcanzada a nivel regional.
“Hoy está en Moya toda la prensa especializada del motor y durante esta semana se ha hablado del municipio en las emisoras de televisión, de radio y en los periódicos”, recordó el primer edil.
Suárez, que estuvo presente en la prueba junto a la concejala de Deportes, Lidia Esther Rodríguez, y Cultura, Lucía Rodríguez, quiso reconocer por este motivo a la escudería Azuatil, presidida por Carlos Larrodé, así como a todos los integrantes de la misma “por la espléndida labor” desempeñada de forma desinteresada en la preparación del evento deportivo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario